jueves, 31 de marzo de 2011

Cruce Mision Benedictina - Mindouli

Cuando salimos de la misión comienza a llover, la pista es igual de desastrosa, barro, baches enormes y trialeras en las pendientes consecuencia de la erosión del agua, el paisaje igual de espectacular, el camino divertido.




Cuando pasas por los poblados la gente te saluda amigablemente, te indican con el pulgar hacia arriba, los niños sonriendo gritan a coro "tubatu, tubatu, Nbote tubatu", no piden dinero salvo casos excepcionales que se golpean la barriga diciendo tengo hambre, luego observaría que en los Congos todo el mundo cuando pide hace ese gesto dando a entender que el dinero es para comprar comida, son gente pacífica y muy simpática, los que piden son una minoría y no lo hacen de malos modos.



Durante el trayecto continuamos ayudando a la gente a desatascar sus coches, al pasar por un poblado no me di cuenta que había un control policial y continué la marcha, julio y Adela me avisaron por la emisora y retrocedí, a partir de ese punto no se puede continuar sin escolta, está lleno de ninjas, los que antaño te ofrecían protección a cambio de dinero a día de hoy los han desterrado de las poblaciones y viven como forajidos en la montaña atracando al que pasa, por ello organizan un convoy, un policía va en el primer coche y otro en el último, como de costumbre me tocó llevar a uno yo iba cerrando filas, en un tramo me decía que corriese más que era una zona muy muy peligrosa, Julio iba delante yo le pitaba y le hacía gestos para que aumentara la velocidad pero su coche no daba más de sí, vi al policía estresado, me repetía en inglés ninjas nos ven corre corre, mucho peligro, creo que exageraba…


Llegamos a Mindouli y el policía nos acompañó a registrarnos al puesto policial, les comentamos que mañana queremos atravesar la frontera dirección Luozi, nos indican que debemos ir a inmigración y luego a la aduana que lo hagamos antes de comer, fuimos a comisaría donde otro agente se montó en mi coche para ir en búsqueda del jefe de inmigración, fuimos a su casa y no estaba y de aquí a recorrer bares hasta que dimos con él, recogió los sellos en su domicilio y nos encaminamos de nuevo a comisaría donde esperaban Adela y Julio, nos puso el sello de salida en nuestro pasaporte y nos dijeron que mañana estuviéramos allí a las 8 para hacer el papeleo de aduana, nos ofrecieron dormir en comisaría desistimos y nos encaminamos al hotel.

Por la tarde hicimos una revisión general a los coches, en el hotel no había ni luz ni agua, tengo la negra con el agua… en Mindouli la única corriente que hay es la que producen los grupos electrógenos, sobre las 8 lo pusieron en marcha ya tenía agua pero no caliente.

Anochecido recorrimos varias tiendas buscando pan para la cena, en algunas había una gran mesa con decenas de enchufes claveteados en ella, donde la gente pone a cargar sus móviles, se contaban por decenas había de todas las marcas y modelos. En ambos lados de la calle abundaban los puestos de comida que se alumbraban con camping gas, parecía una feria . No encontramos pan.

No hay comentarios:

Publicar un comentario